Columna | Edson Báez
Aunque la estrategia correcta no nos garantice
el triunfo en todos los casos, la ausencia de estrategia nos llevará al fracaso
en la mayoría de los casos.
–
Christopher Arterton
El alma de una campaña política ganadora está en su
estrategia, por eso muchos aseguran que el alma está en el cerebro. Si estás a
punto de participar en algún proceso electoral este año, espero no sea muy
tarde para decirte que Sí o Sí debes tener una estrategia bien definida para tu
campaña.
Una estrategia que esté bien pensada y ejecutada podría
significar la victoria o, en su caso, el llegar a los objetivos planteados.
Porque debe quedar claro que no todas las campañas políticas tienen como meta
ganar la elección.
Armar una estrategia político electoral no es tarea fácil y
debe realizarse por expertos en la materia, que tengan acceso a la información
necesaria, a los contextos y a los detalles más profundos que podrían o no
estar en juego.
Aquí le daremos una ligera barrida a algunos aspectos que
me parecen fundamentales a la hora de empezar a hacer la estrategia para tu
próxima campaña.
1.- Objetivos claros: Define claramente los objetivos de tu
campaña. Estos podrían incluir ganar elecciones, crecer en conocimiento entre
los electores, obtener cierta cantidad de votos para obtener un espacio, entre
otros.
2.- Análisis del entorno político: Comprende el entorno
político en el que te encuentras. Analiza la situación actual, la competencia,
los problemas clave y las oportunidades.
3.- Identificación del público objetivo: Define tu
audiencia. ¿A quién estás tratando de llegar? Segmenta tu base de votantes o
simpatizantes para adaptar tu mensaje de manera más efectiva.
4.- Mensaje claro y coherente: Desarrolla un mensaje claro
y coherente que resuene con tu audiencia. Asegúrate de que tu mensaje destaque
los problemas clave y cómo planeas abordarlos.
5.- Plataformas de comunicación: Elige las plataformas de
comunicación adecuadas. Esto podría incluir medios tradicionales como
televisión y prensa, así como redes sociales y eventos comunitarios.
6.- Movilización de votantes: Crea estrategias para
movilizar a tus partidarios y aumentar la participación electoral. Esto puede
incluir la utilización de voluntarios y la implementación de tácticas de
movilización en redes sociales, entre muchas otras cosas.
7.- Investigación de oponentes: Conoce a tus oponentes.
Investiga sus fortalezas y debilidades para que puedas destacar tus propias
fortalezas y aprovechar las oportunidades.
8.- Planificación de eventos: Organiza eventos que te
permitan conectarte con la comunidad. Estos eventos pueden variar desde mítines
y debates hasta reuniones más pequeñas en vecindarios.
9.- Monitoreo y ajuste: Implementa un sistema de monitoreo
para evaluar el rendimiento de tu estrategia. Si es necesario, realiza ajustes
según los resultados y las cambiantes circunstancias políticas.
10.- Cumplimiento legal: Asegúrate de cumplir con todas las
leyes y regulaciones electorales. Esto incluye la presentación adecuada de
informes financieros y el cumplimiento de los límites de gastos.
Recuerda que una estrategia política exitosa implica
flexibilidad y adaptabilidad. Las circunstancias pueden cambiar, y tu campaña
debe ser capaz de ajustarse según sea necesario. Además, la transparencia y la
autenticidad son clave para construir la confianza de los votantes.
Prepara a tu equipo para lo que viene, porque después de
armar una estrategia coherente y completa, lo que resta es ejecutarla
correctamente para que pueda ser llevada al éxito.
Después de todo esto, ¿todo listo para tu siguiente
campaña?
